Esta semana les recomendamos el texto:
Francisco Bacon declaró que la facultad de comparación es una de las expresiones más elevadas de la actividad mental. Que Bacon fue correcto en ello, es evidente, porque en todas partes vemos métodos basados en la comparación. Una cosa es llamada buena porque es mejor que alguna otra; grande porque es mayor que otra, o pequeña porque es insignificante con relación a lo que le rodea.
Se dice que ciertas tribus que habitan las regiones de los Himalayas, viven en valles. Los valles tibetanos tienen una altura igual a las montañas más altas de las Rocosas y de las Sierras. Los valles tibetanos están, actualmente, a unos 15.000 pies sobre el nivel del mar, pero son llamados valles porque los rodean montañas que se alzan a miles de pies sobre ellos. Por eso, la falacia de la comparación resulta evidente.