Esta semana les recomendamos el texto:
El cuerpo vital de Jesús es de muy elevado desarrollo y fue empleado por el Cristo durante sus tres años de ministerio.
El Cuerpo Vital de Jesús – Max Heindel
Tomemos ahora el caso de Cristo cuando penetró en el cuerpo denso de Jesús. Los átomos del cuerpo de Jesús vibraban a un ritmo mucho más lento que la fuerza vibratoria del Espíritu de Cristo. En consecuencia, debía producirse una aceleración y durante los tres años de servicio esta gran rapidez de las vibraciones hubiera destrozado el cuerpo, si no fuera por la voluntad poderosa del Maestro y los conocimientos y habilidad de los Esenios que lo cuidaban.